¿Cómo debe ser el comité de dirección de mi empresa?

¿De qué hablaremos?

¿Qué es un comité de dirección?

El comité de dirección es un órgano de gestión empresarial dónde se reúnen los cargos más altos de una empresa para gestionar y definir la estrategia, objetivos y viabilidad a largo plazo de una organización.

La departamentalización ha provocado que muchos empleados y directivos no tengan claro los objetivos del negocio, sino únicamente las metas de su departamento, sin embargo, aunque esta práctica es eficaz y aumente la productividad, en ocasiones puede generar “dudas” de a dónde se quiere llegar.

El comité de dirección tiene como finalidad dar una visión en conjunto a todos los directivos de la situación de la empresa, coordinar las distintas áreas, organizar y poner en marcha de diferentes propuestas.

La periodicidad de los comités de dirección dependerá de la empresa, aunque una vez al mes es recomendable que se reúna los directivos de las distintas áreas para facilitar la coordinación entre los diferentes departamentos.

El comité de dirección tiene un carácter estratégico y operativo dónde los cargos más altos piensan y debaten decisiones globales para la empresa y un plan para llevar a cabo. También se hace un seguimiento de los objetivos.

¿El comité de dirección de mi empresa funciona bien?

 Es triste, pero cierto pensar que existen estudios que afirman que el 28% de las reuniones de una empresa son poco productivas.

El tiempo que aborde el comité de dirección debe ser lo más eficiente posible, es por ello, que esta reunión debe ser concisa, manteniendo el enfoque en la temática principal con el fin de llegar acuerdos y definir los siguientes pasos estratégicos.

Es necesario cuestionarse algunas de las siguientes preguntas para conocer la eficacia del comité de dirección para replantearse si debe haber algún cambio en la estructura organizativa y funcional de la empresa o la forma de llevar a cabo estas reuniones entre directivos.

  • ¿El equipo está bien delimitado?
  • ¿Los directivos representan las diferentes áreas y departamentos de la empresa?
  • ¿El equipo es multidisciplinar?
  • ¿Las reuniones siguen el hilo conductor principal?
  • ¿Tienen carácter estratégico?
  • ¿Todos los miembros tienen actitud participativa?
  • ¿Se plantean nuevas propuestas o proyectos?
  • ¿Existe un clima de confianza entre los integrantes?
  • ¿Hay normas de conductas establecidas?
  • ¿La duración es la adecuada?
  • ¿El lugar de reunión incentiva y motiva a los directivos?
  • ¿Hay periodicidad en los comités?
  • ¿Es la adecuada para nuestra empresa?

¿Qué temas a tratar en un comité de dirección?

Los temas a tratar en un comité de dirección dependerán de los objetivos de cada organización, aunque debe tocar los siguientes temas:

  • Propuestas de mejora o creación de nuevos proyectos.
  • Redireccionar objetivos y el camino idóneo para cumplir con la visión y objetivos de la empresa.
  • Evaluar el éxito de propuestas anteriores.
  • Crear marco estratégico de la empresa.
  • Informar cambios en el sector dónde se ejerce la actividad.
  • Valorar si la empresa cumple con los acuerdos laborales establecidos.

Miembros del Comité de Dirección

Los miembros que son parte del comité de dirección depende únicamente de la elección del CEO, aunque por regla general está formado por los directivos más próximos al CEO y por los líderes de cada departamento u área de la compañía.

No existe número de personas que deben de formar el comité de dirección, aunque existen recomendaciones para que un funcionamiento correcto y eficaz:

  • Empresa entre 50 y 100 trabajadores: 5 representantes.
  • Empresa entre 100 y 250 trabajadores: 9 representantes.
  • Empresa entre 250 y 500 trabajadores: 13 representantes.
  • Empresa entre 500 y 750 trabajadores: 17 representantes.
  • Empresa entre 750 y 1000 trabajadores: 21 representantes.

Estos números son totalmente orientativos. Dependiendo de las necesidades de la empresa o estructura organizativa, el número puede aumentar o disminuir.

El comité de dirección es necesario para cualquier tipo de empresa, independientemente del tamaño, aunque tiene más peso y es más necesario cuando hablamos de empresas con más de 50 empleados. Sin embargo, en pequeñas empresas ayudaría a reforzar el rendimiento colectivo,  generar más fuerza en el proyecto, y validación de decisiones estratégica propuestas por el CEO.